Bitácora de contenidos: sábado 22 de julio de 2017.

Bitácora de contenidos: sábado 22 de julio de 2017.

En este segundo encuentro de la asignatura Tecnología Educativa, en el primer momento, iniciamos nuestra clase con el pase de lista por parte del maestro Etanislao de la Cruz y una oración, la cual fue hecha por la compañera Claritza Polonia, seguida de una bienvenida por parte del maestro.

A continuación, tuvimos la oportunidad de escuchar y ver una canción, titulada “No te rindas”, de René Gonzales. Invita a ser valientes, no rendirnos, aunque las situaciones parezcan difíciles, confiar en Dios, enfrentar las incertidumbres y superarlas para ser mejores personas. 

 Logramos hacer una retroalimentación de lo tratado en la clase pasada.

El maestro de la Cruz hizo inferencia sobre que, “vivimos en una era digital que requiere de cambios”. No estamos en el tiempo donde el maestro se sentaba a llevar la información que el alumno necesitaba. Ahora se tiene un espacio de aprendizaje, donde el maestro y el alumno se compenetran en la experiencia, siendo el maestro quien dirige el proceso.

“Vivimos en la sociedad de la información, no así en la sociedad del conocimiento”. El conocimiento no se tira, no se tiene, el conocimiento se adquiere. Un ejemplo claro es que las redes están llenas de información, pero no tenemos conocimiento de ellas. El conocimiento, es cuando tengo la capacidad de procesar la información.

Socializamos y reflexionamos sobre la diferencia entre datos e información: los datos carecen de significado: La unidad mínima de almacenamiento carente de significado, la información debe tener sentido, puesto que tiene que ser procesada (dejar un mensaje). Cuando tengo datos y los proceso, genero información, cuando proceso esa información genero conocimiento y con el conocimiento adquiero la sabiduría. La información es el conjunto de datos ya procesados.

Estamos en el siglo XXI, y la educación actual demanda unas competencias que están claramente definidas. Cuando un joven se forma con pensamiento lógico, crítico, reflexivo, estamos formando para la vida. Cuando un joven es capaz de desenvolverse en los distintos medios tecnológicos estamos también formando para el desempeño.

Analizamos una imagen, sobre el sistema de educación, la que nos llevó a reflexionar sobre la frase de Albert Einstein: “Todo el mundo es un genio. Pero si juzga a un pez por su habilidad de trepar un árbol, pasará el resto de su vida creyendo que es un idiota”.

El maestro nos hizo reflexionar sobre su auto-concepto de Hiperactividad: Incapacidad del aula o del sistema educativo de atender las situaciones individuales de cada alumno. Cada alumno es distinto, por lo que tienen necesidades individuales distintas. Debemos tratar de tener claro, cuál es el estilo de aprendizaje de cada uno de nuestros alumnos. Permitir a que cada alumno se desarrolle dentro de su estilo de aprendizaje y comprender que los alumnos de ahora no tienen las características de los alumnos de antes. En el contexto educativo debemos evaluar con justicia, no con equidad; puesto que cada alumno debe ser evaluado de acuerdo a sus particularidades.

Así mismo, en la mediación pedagógica, se nos presentó las nuevas destrezas cognitivas que tienen los jóvenes de hoy, o mejor conocidos como Nativos Digitales.

Conocimos y explicamos las características de los nativos digitales (Marc Presky)

ü  Reciben y procesan información rápidamente.

ü  Gustan del trabajo en paralelo y la multitarea.

ü  Prefieren imágenes a texto.

ü  Prefieren acceso aleatorio (uso de hipertextos)

ü  Laboran mejor en red, conocen el lenguaje digital.

ü  Prosperan: satisfacción inmediata, bajo recompensas frecuentes y resultados rápidos.

ü  Dificultoso prestar atención.

El niño de ahora tiene características que nosotros no tenemos, pero que tenemos que conocerlas para poderlos comprender. Ellos son multitareas. Si no conocemos su escenario no será posible comprenderlos. Los jóvenes de ahora prefieren el hipertexto (información digital) que el texto plano (literatura impresa). La desventaja es que en el hipertexto puede distraerlos más fácil.

Los Nativos Digitales no conocen un mundo sin tecnología.

Citamos la educación de Corea del Sur, la cual tiene como característica la  Ubicuidad: Educación en todo momento y en todo lugar.

Así mismo, el maestro presentó  y explicó un decálogo de competencias básicas para la educación del siglo XXI:

1.       Leer siempre tratando de comprender (Enfatiza la lectura comprensiva).

2.       Escribir de manera argumentada.

3.       Automatizar lo rutinario y dedicar esfuerzo a pensar lo relevante.

4.       Analizar los problemas de manera rigurosa.

5.       Escuchar con atención y tratar de comprender.

6.       Hablar con claridad, convencimiento y rigor.

7.       Crear empatía con los demás.

8.       Cooperar para el desarrollo de tarea.

9.       Tener metas razonables que te permitan superarte día a día. (Tener un plan de metas que me permitan superarme día a día).

10.   Buscar información de manera crítica.

Reflexionamos que, en la escuela tradicional, la preocupación central es ensenar una gran cantidad de conocimientos, orientados a un currículum cuantitativo dando como resultado aprendizajes acumulativos, donde el profesor se interesa más en el aprendizaje individual de sus alumnos y enfatiza la exposición de los contenidos como uno de los recursos didácticos más generalizados en este tipo de enseñanza, propiciando así la memorización, la competitividad y la pasividad de los alumnos, mientras que la escuela 2.0 es moderna, cuenta con docentes preparados con las nuevas tecnologías del Siglo XXI: internet, medios audiovisuales y todo lo que se requiere para una buena enseñanza donde los estudiantes participan activamente en su aprendizaje.

Aprendí sobre la diferencia entre datos e información, me hizo reflexionar sobre el concepto herrado que se tiene de la hiperactividad y sobre las nuevas destrezas cognitivas que tienen los jóvenes de hoy (nativos digitales) y visto el decálogo de competencias básicas para la educación del Siglo XXI. Eso me sirve para comprender mejor mis alumnos y para motivarme a ser un maestro motivador de los procesos de enseñanza-aprendizaje.

Después de la clase, el maestro dedicó unos minutos para dar seguimiento a las tareas asignadas y compartir las experiencias de la misma. Culminamos la clase con una reflexión de lo tratado en el día.